Como psicóloga clínica, mi propósito es acompañar a las personas en sus procesos de cambio y crecimiento emocional, brindando un espacio seguro donde puedan comprenderse, sanar y reencontrar equilibrio. Creo en el poder de la escucha, la empatía y el trabajo terapéutico como medios para transformar el malestar en autoconocimiento.

Me convertí en Psicóloga porque siempre me ha interesado comprender a las personas y acompañarlas en sus procesos de cambio. La psicología me permite unir la ciencia con lo humano: escuchar, contener y ayudar a sanar. Lo que más disfruto de mi trabajo es ver cómo, poco a poco, alguien vuelve a sentirse en paz consigo mismo y empieza a vivir con más claridad y sentido.