Desde una edad temprana, mi fascinación por la complejidad de la mente humana y mi innato deseo de comprender y ayudar a los demás me llevaron a elegir la psicología como mi campo de estudio. La capacidad de aliviar el dolor emocional y contribuir al bienestar mental siempre ha sido mi principal motivación. A lo largo de los años, he desarrollado un enfoque integral hacia la psicoterapia, y mi formación en terapias innovadoras como EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares) y IFS (Sistema de la Familia Interna) ha fortalecido mi compromiso con abordar las raíces profundas de la angustia emocional. Estas técnicas no solo amplían mi caja de herramientas terapéuticas, sino que también reflejan mi dedicación a proporcionar tratamientos eficaces y personalizados que permitan a las personas sanar y transformarse en un nivel profundo. La psicología, para mí, es más que una disciplina académica; es un medio para cultivar la empatía, la resiliencia y la esperanza en la vida de aquellos que buscan superar sus desafíos emocionales. Estoy emocionada de aplicar mi conocimiento y habilidades para guiar a las personas en su viaje hacia la curación y el crecimiento emocional.